Hagamos un trato.
Nada de promesas que no cumplirás, seamos amigos.
Los amigos, los buenos amigos, son para siempre y si alguna vez,
ves en mi rostro una llama de amor, no pienses que es por ti,
aunque por tí me esté muriendo, intentemos otros caminos, al fin y
al cabo, nunca tuvimos nada compartido, más que el corazón y este
fuego que me arde por dentro y olvidemos que ya vivimos otras vidas juntos.
ves en mi rostro una llama de amor, no pienses que es por ti,
aunque por tí me esté muriendo, intentemos otros caminos, al fin y
al cabo, nunca tuvimos nada compartido, más que el corazón y este
fuego que me arde por dentro y olvidemos que ya vivimos otras vidas juntos.
De todas formas de nada nos sirven si ahora no podemos
compartirla, olvidémonos de todo, yo te reto a que lo hagas...porque sé, que yo no podré hacerlo.
compartirla, olvidémonos de todo, yo te reto a que lo hagas...porque sé, que yo no podré hacerlo.
0 comentarios:
Publicar un comentario