ves en mi rostro una llama de amor, no pienses que es por ti,
aunque por tí me esté muriendo, intentemos otros caminos, al fin y
al cabo, nunca tuvimos nada compartido, más que el corazón y este
fuego que me arde por dentro y olvidemos que ya vivimos otras vidas juntos.
compartirla, olvidémonos de todo, yo te reto a que lo hagas...porque sé, que yo no podré hacerlo.